LIWARD se basa en cuatro pilares fundamentales:

La Inteligencia Jurídica Avanzada implica el uso de herramientas tecnológicas como el big data legal y el análisis predictivo, lo que permite la identificación de patrones legales y jurisprudenciales clave, así como una evaluación exhaustiva de riesgos y oportunidades legales.

La Planificación Estratégica se centra en el diseño de escenarios hipotéticos basados en datos, el desarrollo de estrategias personalizadas para cada caso y la definición de objetivos medibles y alcanzables. La Ejecución Precisa y Controlada asegura la implementación coordinada de las estrategias definidas, la adaptación rápida a cambios procesales o contextuales y el control de narrativas mediáticas y judiciales.

El uso de sistemas propios  de Inteligencia Artificial y Big Data para el análisis e interpretación de un gran volumen datos procesales.

Por último, la Evaluación y Mejora Continua implica el monitoreo constante de resultados, el ajuste de estrategias en función de la evolución del caso y la documentación de aprendizajes clave para futuras referencias.

LA METODOLOGIA LIWARD SOLO ESTA DISPONIBLE PARA NUESTROS CLIENTES.

VENTAJAS DE LA METODOLOGÍA LIWARD.

En primer lugar, la estrategia personalizada es un aspecto distintivo de LIWARD. Permite diseñar soluciones específicas que se alinean con las necesidades particulares de cada cliente. Al comprender la singularidad de cada caso, se desarrollan estrategias únicas que maximizan las posibilidades de éxito, evitando los riesgos asociados con las aproximaciones estándar o genéricas.

Por otro lado, la anticipación y el control son elementos clave que diferencian a LIWARD. A través del uso de herramientas de análisis predictivo y una evaluación exhaustiva del contexto legal, esta metodología permite identificar y mitigar riesgos antes de que se materialicen. Esta capacidad proactiva no solo protege los intereses del cliente, sino que también proporciona una ventaja competitiva al preparar respuestas ante posibles contingencias.

Otro punto fuerte de LIWARD es su orientación hacia resultados tangibles. A diferencia de enfoques tradicionales que pueden centrarse en la gestión del proceso sin medir el impacto real, LIWARD establece objetivos claros y alcanzables desde el inicio. Esto permite a los clientes visualizar y evaluar el éxito de las estrategias implementadas, generando confianza y transparencia a lo largo del proceso.

Finalmente, la adaptabilidad es una característica esencial de esta metodología. En un entorno legal dinámico y en constante cambio, LIWARD se distingue por su capacidad para ajustarse rápidamente a nuevas circunstancias o requisitos procesales. Esto asegura que las estrategias permanezcan relevantes y efectivas, incluso frente a imprevistos o evoluciones inesperadas del caso.